Muebles de guardado abierto tipo repisa, con estantes fijos o regulables.
.Las oficinas modernas deben contar con diversa clase de muebles de guardado, a fin de aprovechar cada espacio disponible y optimizar con ello el uso que se le da a cada superficie. De otra forma la calidad de vida dentro del espacio de trabajo, y también la productividad, pueden disminuir sensiblemente, perdiéndose confort, funcionalidad y eficiencia. En este contexto tan particular el mueble librería puede aportar soluciones importantes, ofreciendo generoso espacio de guardado en sus estantes abiertos tipo repisa, que por otra parte pueden ser del tipo fijos, o incluso regulables.
Mucha gente cree que los muebles librería sólo aplican a la guarda de libros, o al despliegue de abigarradas bibliotecas llenas de sesudos y voluminosos ejemplares y textos. Pero la realidad actual es muy distinta: esta clase de mobiliario es muy apta para oficinas porque permite -además del diseño de bibliotecas importantes, que por ejemplo pueden ir de una pared a la otra- la guarda de toda clase de documentos y objetos y la inclusión de dispositivos electrónicos (una TV en una sala de reuniones, por ejemplo).
Es decir, hoy estos muebles para librería tienen un carácter totalmente multifuncional: allí es factible colocar lo que se quiera, del modo en que se quiera. Las librerías ya no son, como en el pasado, un simple soporte para guardar libros u otros objetos relacionados; hoy han pasado a convertirse en soluciones decorativas excelentes, con enorme capacidad de almacenaje.
En materia de muebles de librería hoy existen tamaños y estilos distintos, aptos para armonizar con oficinas muy diferentes –modernas, más tradicionales, etc.- y entornos muy disímiles. Antes de encargar estos muebles a un fabricante especializado como Ofitop, por ejemplo, que confecciona distintos modelos de librería y otros muebles de guardado tanto a medida como en versiones seriadas, conviene tener en claro qué clase de objetos se van a guardar en los estantes abiertos de este mueble tipo biblioteca. Esto definirá las medidas que será preciso prever para el fondo.
Por otra parte es importante estimar el espacio concreto de que se dispondrá, y el presupuesto, ya que si ambos escasean seguramente lo más indicado será encargar una librería del tipo abierta, sin puertas. Además siempre es factible complejizar el diseño e incorporar muebles bajos; o agregar al área de almacenaje otros muebles auxiliares, que ofrezcan otra clase de uso.
A la hora de pensar en un mueble biblioteca de madera para las oficinas conviene tener presente algunos conceptos. Por ejemplo: al diseñar la librería, si lo que se desea es generar una imagen de orden, lo ideal es que los huecos entre los estantes sean simétricos; otro dato es que para guardar libros sólo hará falta contar con 30 cm de espacio hasta el fondo.
Hoy muchos diseñadores optan por pintar el mueble biblioteca del mismo tono que la pared: con ello logran una apariencia más moderna, y se aligera la presencia de este mobiliario, sin sobrecargar la oficina. También es frecuente que se eleve la librería hasta lo alto, en ocasiones hasta el techo; de tal suerte se aprovecha toda la superficie vertical de la pared para guardar objetos. Este último despliegue es muy práctico para el caso en que haya que diseñar muebles para bibliotecas públicas, por ejemplo, en el que los espacios de guarda deben ser muy generosos.
En el contexto puntual de un puesto de trabajo en oficina, no obstante, un mueble para biblioteca sobrio y de una altura estándar puede brindar respuestas perfectas y funcionales.
Si usted busca muebles para bibliotecas en madera, en Ofitop podemos hacer un desarrollo especial que armonice con su oficina y aproveche de la mejor manera el espacio con que cuenta. ¡Contáctenos ya!